Historia de la Canaricultura de color

El hombre cr�a canarios hace m�s de cinco siglos. Los primeros �Serinus canarius�, fueron descubiertos en las Canarias por navegantes en el a�o 1402 y llevados al continente europeo, donde comenzaron a ser criados en cautiverio a partir del a�o 1478. En 1709 exist�an canarios verdes, canelas, blancos, amarillos y unos pocos de ojos rojos supuestamente. En las 29 variedades estaban incluidos los p�jaros pintados y el factor intenso que ya se har� presente. La canaricultura de color surgi� al inicio del siglo con la aparici�n de la mutaci�n �gata. Estos mutantes nacidos en el criadero de canto cl�sico de HELDER en Lee Waarden, Holanda, fueron denominados ASH GRAY. Surgieron de un casal de p�jaros verdes, y eran hembras, realizando cruzamientos por consanguinidad se fij� la mutaci�n, dando origen al gran n�mero de mutaciones que despu�s surgieron. En 1908, en el criadero de la Sra. Lee en Matinborough, en Nueva Zelandia, surgieron los blancos de un casal de amarillos nevados. C�mo ya exist�an los blancos dominantes con incrustaciones amarillas, a estos se los llam� RECESIVOS. Posteriormente, fue verificado que estos ejemplares no sintetizaban vitamina A. Al Dr. Duncker se debe el primer trabajo sobre gen�tica de canarios de color y los estudios para la producci�n de un canario de color de fondo rojo, utilizando los h�bridos de canarios con el Tar�n de Venezuela. En Alemania el Sr. Dans, de Konigsberg, fue el pionero, el m�todo sugerido fue del Dr. Duncker. El trabajo se basaba en las siguientes consideraciones te�ricas: el canario no posee el factor rojo en su patrimonio gen�tico, consecuentemente, gen o genes que produjeran la pigmentaci�n roja de otros p�jaros deber�an ser transferidos al canario.

Esto implicaba hibridaciones y la producci�n de un h�brido f�rtil. El p�jaro utilizado fue el Tar�n (Spinus Cuculatus) macho, un peque�o p�jaro con el cuerpo de color rojo vivo, cabeza, alas y cola negras con barras rojas en las alas, el h�brido obtenido, era muy apreciado y tenido como f�rtil. De acuerdo con Duncker el Tar�n, no ten�a amarillo en su c�digo gen�tico. As� el cruzamiento ser�a entre un p�jaro que pose�a el amarillo con otro de composici�n contraria. Los h�bridos as� obtenidos recib�an un factor amarillo y otro rojo dando como resultado un ejemplar de color �acobrado�. El cruzamiento entre dos h�bridos, podr�a producir un p�jaro con caracter�sticas del canario con el color del Tar�n Las hembras h�bridas eran todas est�riles y el procesos tuvo que ser modificado utiliz�ndose nuevamente canarias con los machos F1. Duncker preconiz� entonces canarias blancas dominantes en la esperanza de que el factor blanco dominante enmascarase el amarillo y no tuviese efecto sobre el rojo. El esperaba h�bridos rojos y naranjas y fueron obtenidos h�bridos cobres y grises de ambos sexos, pues el factor blanco dominante enmascara tanto el rojo como el amarillo. En una tercera tentativa, se cruzaron con hembras blancas recesivas con la esperanza que a ejemplo de los cruzamientos con amarillos, surgiesen ejemplares rojos portadores de recesivo. Este cruzamiento fue hecho por A.K.GILL en el a�o 1933 y los resultados fueron desalentadores. Los machos F1 eran cobres y las hembras eran agrisadas como las hembras del Tar�n. Las hembras F3, ya se mostraban f�rtiles y con trabajo de selecci�n consigui� reunir, despu�s de m�s de 10 a�os, los genes que permiten la asimilaci�n del rojo y los p�jaros actuales, que con la alimentaci�n apropiada, consiguen obtener tonalidades de color rojo bien vivas.